Realizar actividades manuales es una buena manera de trabajar el desarrollo de las capacidades cognitivas y la estimulación de los sentidos.
Bajo esta premisa se llevan a cabo las actividades de experimentación, donde con un pequeño grupo y de manera muy personalizada, se realizan proyectos manuales diversos.
Hace un tiempo, la Biblioteca de Badia del Vallès cambió su mobiliario y consideraron que las sillas podrían servir para realizar alguna actividad en la Fundación. Y así ha sido. Ahora, por ejemplo, se están experimentando con las posibilidades del decoupage a través de la recuperación de una de las sillas.
La silla tendrá una nueva vida pero los beneficios que aporta a quien realiza la actividad son muchísimos. La concentración, el tacto con diversas texturas y temperaturas, la creatividad o la habilidad manual, por ejemplo pero también se reciben estímulos sonoros gracias a la música de fondo que cada día escoge alguien diferente en base a sus preferencias.
Hay que decir sin embargo, que las actividades propuestas siempre tienen una finalidad útil y práctica: desde pisapapeles hasta cajas de madera de guardar las infusiones pasando por portalápices de sobremesa.
Cada dos meses se cambia la propuesta manual, por lo que la diversidad y la creatividad están aseguradas.
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